Sí. Muchas empresas incluyen en sus estatutos el derecho de arrastre (drag along) para evitar que los inversores minoritarios bloqueen una posible venta de la compañía (exit), en el caso de que sea la opción escogida por la mayoría.
Los detalles de la aplicación del derecho de arrastre varían de una empresa a otra, por lo que debes consultar los estatutos y el pacto de socios de la empresa en la que estás interesado en invertir. Por lo general, al aplicar el derecho de arrastre, la mayoría de los socios puede obligar al resto a vender sus participaciones, en los mismos términos y al mismo comprador.
Por ejemplo:
- Los fundadores de la empresa X tienen el 80 % de las participaciones. Los inversores de Crowdcube tienen el 20 % restante.
- El comprador Y acuerda con los fundadores comprarles sus participaciones a 5 € cada una.
- Se aplica el derecho de arrastre, de manera que los inversores de Crowdcube también deben vender sus participaciones a 5 € por participación. En este caso, los inversores de Crowdcube no pueden negarse a vender.
- El comprador Y adquiere el 100 % de las participaciones de la empresa X.
El precio que reciban los inversores será el que hayan acordado los socios mayoritarios. Aunque el interés de los socios es vender la empresa a un mayor valor, en determinados casos, el precio podría llegar a ser menor al que inicialmente pagaron los inversores por sus participaciones.