Al invertir en una empresa a través de Crowdcube, te conviertes en accionista de dicha empresa. El porcentaje que adquieras de la empresa dependerá de la cantidad que inviertas y del porcentaje de capital que emita la empresa a cambio de tu inversión. Una vez se procese tu inversión, recibirás un certificado de participaciones.
Se trata de inversiones a largo plazo que ayudan a la empresa a crecer más de lo que lo harían si se financiaran por las vías tradicionales. La mayoría de inversiones suponen la adquisición de participaciones ordinarias, con derechos económicos y políticos, aunque estos últimos suele ejercerlos el nominee. Los detalles sobre el tipo de participaciones aparecen en la página de cada empresa en Crowdcube.
Invertir en startups y empresas en fases iniciales de desarrollo entraña riesgos. La mayoría de las startups fracasan o no logran ofrecer rentabilidad a sus accionistas. La capacidad de la empresa de ofrecer liquidez es limitada, ya que, a menudo, está supeditada a la compra de la empresa por un tercero. El pago de dividendos no es común. Por último, es bastante probable que el porcentaje de propiedad de los inversores se diluya en el futuro al llevarse a cabo sucesivas ampliaciones de capital.
Por tanto, los inversores deben implementar una estrategia de diversificación a la hora de crear un porfolio de inversión. Diversificar implica repartir el dinero entre múltiples inversiones, de forma que el inversor pueda hacer frente a condiciones adversas de mercado y que las pérdidas no generen un gran impacto. Sin embargo, los riesgos seguirán siendo elevados.